"ATADO Y BIEN ATADO"
Que vamos a explicar de censura y opresión a un país que ha vivido casi 40 años entre guerra civil, posguerra, y dictadura bajo la sombra de un aguilucho impuesto a la fuerza por unos pocos. Donde la vida de miles de españoles estuvo marcada por la disciplina militar y la obediencia a un autócrata como si de un dogma se tratase. Vidas controladas por un régimen fascista y no nacionalcatólico como en algunas escuelas aún se estudia. Un régimen famoso y conocido en todo el mundo menos en nuestro país, donde camuflado, vemos el mayor caso de censura y engaño en el mundo actual.
Es vergonzosa la manera en la que se ha ocultado y probablemente se seguirán tapando tantos años de historia de un país, donde nos han mostrado lo que convenía a unos pocos, a los poderos vencedores de aquella guerra no tan "entre hermanos".
Esta situación se podía comprender en tiempos del NO-DO, de la aprovechada aplicación de ley de fugas y del garrote vil. Pero que hoy en día sigamos con la venda en los ojos solo puede justificarse debido a que aquellas personas, quienes hace 60 años fusilaban y arrojaban en cunetas a cientos de escritores, maestros y obreros, culpados de masonería o rebelión, y se abrazaban con los mayores dictadores de nuestra historia contemporánea, no están tan lejos. Porque tal vez, si hablamos de CEDA, FET y de las JONS, Francisco Franco o Primo de Rivera, más de un "nostálgico" de nuestro país levantaría el brazo. Y quizás no nos alejaríamos tanto del pensamiento de algunos altos cargos, causa de la ausente depuración de cargos y funcionarios tras la muerte del "caudillo" aquel 20 de noviembre al que muchos esperaban con la botella de champan por descorchar.
Tantos años de miedo y represión sin que se pusiera el sol, o tal vez estando demasiado cara él. Para que aún hoy en día no se cuente la absoluta realidad, para que los medios muestren que la fundación Francisco Franco es financiada por todos nosotros, la inmensa fortuna que continúa en posesión de la familia Franco, o quién nombró al hasta hace cinco años rey de nuestro país. Pero esto aún resulta muy utópico, pues como dijo el general, que no "ísimo", antes de morir, lo dejó todo "atado y bien atado".